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La vida se mide en días, en meses, en años, pero la madurez se mide en experiencias. Son las experiencias y cómo las afrontamos lo que nos hace madurar y ser emocionalmente más fuertes. Cuando aceptas que hay situaciones, que pueden ser duras o desagradables, en ese momento también te haces más fuerte.

Estas son 4 duras verdades que te hacen más fuerte emocionalmente.

Nadie está tan ocupado para NO contestar un mensaje: Esa persona a la que le enviaste un mensaje, sea quien sea, no está tan ocupado como para no contestarte si en realidad le interesa hacerlo. No le busques excusas a alguien que no le interesa contestar tus mensajes, si no lo hace porque no quiere.

Nunca vas a complacer a todo el mundo: Por más que lo intentes y por muy bien que hagas las cosas, siempre existirá alguien que no estará complacido con tu forma de actuar y eso es algo con lo que debes lidiar y que debes entender. Cuando lo asumes y puedes convivir con ese hecho, estarás en paz contigo misma.

Todos tienen su propio interés: Sí, existe mucha gente que quiere ayudarte. Sí, existe mucha gente que ayuda a otros de forma desinteresada. Sí, existe mucha gente buena. Sin embargo es necesario que entiendas y aceptes que por muy buena que sea una persona, siempre tendrá sus propios intereses, cosas que pondrá por encima de cualquier otra, porque es lo que le interesa, le hace feliz y quiere lograr y eso no tiene nada de malo.

Nadie te debe nada: Una de las actitudes más tóxicas que puedes tener es pensar que la gente debe hacer algo por ti. Nadie te debe nada, nadie tiene que hacer algo por ti, todo lo que obtienes en la vida es algo que te ganas con tu esfuerzo.

Las experiencias de nuestras relaciones son las que más nos enseñan. Cuando tomamos los aprendizajes de nuestras relaciones, estamos obteniendo enseñanzas que nos serán útiles para todos los aspectos de la vida.

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Foto: Archivo 123Rf