Solemos buscar el origen de nuestros problemas en otras personas, sin embargo no nos damos cuenta que nosotros mismos podemos ser nuestros peores enemigos. Hay cosas tóxicas que te haces a ti misma que te causan mucho daño.
Cuando reconocemos y nos hacemos responsables de nuestros actos es que podemos aprender qué debemos mejorar. Estas cosas tóxicas que te haces a ti misma son algunas de ellas.
Querer encajar: Hay lugares en los que no encajamos y eso no tiene nada de malo. Es normal encontrar situaciones que no son las adecuadas para nosotros y entender que no encajamos ahí es lo más sano. Haciendo esfuerzos para encajar te estás causando mucho daño.
Pensar de más: En la vida no hay que pensar de más. El quedarse pensando una y otra vez a lo único que nos lleva es a no actuar. En ocasiones hay que ser un poco impulsivos y actuar, no quedarte pensando una y otra vez sobre lo mismo.
El mayor daño te lo haces tú.
Cargar problemas ajenos: Hay que saber hasta qué punto podemos ayudar a alguien y ese punto no es otro que cuando ayudar nos hace daño. Cuando te cargas de problemas ajenos como si fueran propios estás llevando contigo una pesada carga que no te corresponde.
Aferrarte al pasado: El pasado es eso, el pasado. El pasado debe servirte para aprender lecciones que pondrás en práctica en el futuro, no un “lugar” para guardar lamentos y aferrarte a cosas que ya pasaron.
Cuando entiendes que la persona que más daño puede causarte en la vida eres tu misma, entonces tomas la decisión de cambiar esas conductas.
[mailchimp_form]Foto: Archivo 123Rf.com
