Siempre podemos ser el mejor aliado o el peor enemigo de nuestros sueños. Tu misma puedes sabotear tu vida y alejarte de aquellas cosas que tienes como metas, puedes, a través de tus conductas, ser la persona que convierta tus sueños en realidades o los destruya por completo.
Aquí quiero compartir contigo 5 formas en las que te saboteas a ti misma.
No puedes lidiar con tus sentimientos negativos: No importa que tan felices seamos, en algún momento tendremos que lidiar con algún sentimiento negativo. Es importante que tengas la capacidad de vivir esos sentimientos, enfrentarlos y superarlos, si te sumerges en ellos y eres incapaz de soportarlos, entonces podrías ser presa fácil de la depresión.
Pospones tus obligaciones: Posponer es uno de los peores enemigos que puedes tener. Cuando tienes que hacer algo lo mejor que puedes hacer es ponerle una fecha y obligarte a cumplirla, porque de lo contrario estarás postergando y postergando, sin que llegues nunca a realmente lograr lo que quieres.
Piensas que te toca más difícil que a otros: Esta es una forma de auto compadecerse. Cuando no alcanzas una meta simplemente te convences de que te toca más difícil que a otras personas y así justificas tus fracaso, en lugar de asumir qué pudiste hacer mal y mejorar.
Dudas de tu talento: Esta es otra forma de poner una coartada si algo no sale bien. Te comparas constantemente con otros y consideras que tienes menos talento, menos capacidad de hacer las cosas e incluso menos suerte, como una forma de poner, antes de empezar una tarea, un freno por si algo sale mal.
Te culpas por las decisiones erradas que tomaste siendo más joven: Todos cometemos errores. En el pasado de cada quien hay errores de los que nos podemos arrepentir, una oportunidad que dejamos pasar, una relación negativa o cualquier otra cosa, pero lo importante en este sentido es aprender de ello y no pasar la vida sufriendo por ese error.
Cuando nuestra actitud es la de ponernos trabas, la de sentir pena por nosotros mismos o la de pensar que las cosas externas nos detienen de progresar, estamos siendo, nosotros mismos, nuestros peores enemigos y quienes nos alejamos de avanzar y alcanzar nuestras metas.
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